Desbloquea la energía, comprende información sobre tu destino
La naturaleza y sus maravillas nos entrega cristales que nos permiten realizar procesos terapéuticos para armonizar nuestra vida.
La sabiduría Celta nos entrega la maravilla de las Runas y su sabiduría.
La palabra ‘runa‘ simplemente significa misterio, susurro o secreto y es una forma de adivinación o sistema de lectura de oráculo que se usa para ayudar a comprender situaciones o preguntas.
Las runas nos ayudan a percibir nuestra energía en este momento, fruto de cómo transitamos las situaciones en el pasado y poder así vislumbrar como se direcciona esa energía sutil en la construcción de nuestro futuro.
MÁS INFORMACIÓN DE LAS RUNAS
El alfabeto rúnico, conocido como futhark por los primeros símbolos que lo componían, era el método que los pueblos germanos y del norte de Europa emplearon desde el siglo III d.C. hasta aproximadamente el siglo XVI o XVII d.C.
Aunque han sido ampliamente estudiadas, su origen es relativamente incierto y son muchas las teorías que lo sitúan en un lugar u otro. Dado que algunas de las muestras más antiguas que se conservan de escritura rúnica contienen símbolos angulosos y letras capitales y está escrito de derecha a izquierda se cree que derivaría o estaría influido por los alfabetos latino o etrusco, modificados por pueblos germanos como los godos y transmitidos hasta tierras escandinavas. Los símbolos podían representar sonidos, animales, objetos o dioses.
El alfabeto base, el llamado futhark antiguo, se empleaba en el norte de Europa desde antes del siglo VIII y estaba compuesto por 24 letras divididas en tres grupos (aettir) de 8 letras cada uno. Este es el alfabeto más representativo de los vikingos, con símbolos más angulosos y rectos y que componían el lenguaje protonórdico utilizado entre los pueblos germanos y vikingos hasta el siglo XII aproximadamente. La expansión de esta lengua por otras tierras hizo que surgieran variaciones como el futhark anglosajón (con 28 letras que representaban sonidos del inglés antiguo que el futhark antiguo no podía reproducir y 33 a partir del siglo X) de las islas británicas durante los años de las invasiones del norte o el futhark nórdico (reducido a 16 letras al utilizar los mismos símbolos para reproducir sonidos distintos), que perduró hasta el siglo XVI. A partir de este momento, las runas pasaron a utilizarse únicamente en inscripciones rituales y vivieron un leve resurgimiento durante el Romanticismo, movimiento que trajo de vuelta las leyendas y la gloria del pasado vikingo de estos países. Según la Enciclopedia Britanica, se tiene constancia de más de 4.000 inscripciones y manuscritos rúnicos, principalmente provenientes de Noruega, Dinamarca, Suecia, Islandia y Gran Bretaña. Dos de los ejemplos más conocidos son la piedra de Rok (Östergötland, Suecia), con una inscripción rúnica que los últimos estudios han traducido como un acertijo, y el Codex Runicus (también de Suecia), un documento del siglo XIV en el que se recoge la ley eclesiástica de Escania.